BRAHMAN, ABRAHAM, YHVH, ADAM & el DEMIURGO
Gracias a la escucha al Maestro Interior, cada vez encuentro más conexiones entre la antigua Sabiduría de los Versos Védicos y las enseñanzas del Antiguo Testamento.
¿Existe una relación entre la deidad suprema hindu, Brahman, y el nombre divino YHVH de la Sabiduría hebrea?
¿Qué relación hay entre el patriarca Abraham y Sara con Brahma y Saraswati? ¿Por qué Abraham casi sacrifica a su hijo primogénito y Brahma acaba sacrificando al suyo?
¿Son el Atman o Espíritu Divino en el humano y el Jiva o Alma psicológica, el Adam y Java del Gan Eden?
¿Por qué la Divinidad también manifiesta energías que llegan a hacerse destructivas, como el Shiva hindu o el Hamashit hebraico?
¿Qué es el Demiurgo? ¿Tiene que ver con el Dios bíblico o hay algo más que indoctos despistados no ven?
Con esto no quiero que se aventuren a dar grandes saltos de razonamiento, sino simplemente ver los patrones de comprensión en el lenguaje antiguo, que no es para las mentes brutas, indoctas e idólatras que abundan en la religión exterior.
El Adam Cósmico / Brahman - YHVH
Los Vedas hablan de una Fuente Primordial incondicionada llamada Brahman, del Sánscrito Manas (Mente) y Brah (Expansión), y por ende, una Mente Cósmica Expansiva que es a su vez como un Árbol con Raíces en los Cielos y frutos en todos los universos.
Huelga decir que el sufijo -man recuerda a Man, i.e hombre en inglés, que es un indicador del Name o Nombre Divino, aquello que representa a lo que es Inefable.
En ese sentido, el Brahman u Hombre Cósmico Expansivo parece un eco poético del Adam Primordial, que en la Sabiduría hebrea es la Luz emanada, que aunque no tiene límites, i.e Ayn Sof, genera universos y se fusiona con ellos.
El Adam Kadmon son las emanaciones luminosas, Ayn Sof Aur, que las Escrituras llamaron Logos, y sus funciones serían: Dios Padre (Origen engendrador), Dios Madre (Luz Gestadora, i.e Morada/Shekina, Yhvh Elohim), Divino Hijo (Conector Engendrador) y Divina Hija (shejina o alma exiliada en la humanidad). Todos los aspectos simbolizados por el Tetragrammaton, YHVH.
Y si bien es cierto que esa ingente cantidad de matices no existe en el misticismo de los Vedas, de modo casi análogo, el Vedanta enseña que las energías del Brahman se expresan en dos aspectos: el Purusha y Prakriti.
El Purusha es el Espíritu Universal u Hombre Cósmico, que por acción de los Ciclos de la Materia o Naturaleza, Prakriti, sus miembros se expandieron en millones fragmentos, dando lugar a los mundos, estrellas, planetas y seres del universo.
Esa interacción de Purusha y Prakriti, Espíritu y Materia, viene expresada en tres fuerzas, algunos de cuyos aspectos se asocian a lo que los griegos llamaban Demiurgo o Artesano del Universo.
A nivel Cósmico las energías del Brahman ejercen de Padre Creador/Generador (Brahma). De ahí que el Brahma sea también llamado Padre Universal de la Humanidad, y personalizado como Ishwara.
Curiosamente en hebreo Ysh es el aspecto Masculino de Adam, y está contenido en nombres sagrados como Yeshua, y al igual que Iswara, es considerado el Nombre del Padre Brahman y Rostro Divino.
Brahman con sus energías también se hace Destructor (Shiva), lo cual recuerda a un aspecto de El-Shaday, la Naturaleza Providente que a veces puede jugar también el papel de Hamashit, el Destructor, que en el pasaje de Éxodo 12 aniquila a los primogénitos egipcios (hijos de la carne), dada la intensa energía de equilibro, que en cambio pasa de largo frente a las puertas de los Israelitas (hijos espirituales), pues pusieron la sangre del cordero en los dinteles, una alusión al trabajo interno, el sacrifico de la pasión carnal egoísta que blinda frente a energías cósmicas que destruyen o elevan, según uno las afronte.
Y en tercer lugar tenemos al aspecto Sustentador, simbolizado por Visnu, que se manifiesta en forma de Avatares, guías divinos que se encarnan, como Krishna, nombre dado al Alma Universal de la Humanidad, el Atman, que evidentemente recuerda al Adam hebraico, y tiene un aspecto caído en la materia densa.
Se da la bendita casualidad de que el relato védico del Purusha o Espíritu universal fragmentado recuerda a la rotura del cuerpo del Adam Primordial en la Sabiduría hebrea, expresada incluso por el Maestro Mesías: a por los suyos vino, pero ellos no le reconocieron (Juan 1:11-12).
La comprensión incomparable y universal que trajo el Maestro Yeshua fue precisamente la que insufló un nuevo espíritu, del cual nace el Nuevo Adam inmortal: tomad el Pan de Sabiduría y bebed el nuevo vino de Vida, porque esto es mi cuerpo que es entregado por vosotros.
Una alegoría que casi nadie entendió. Incluso en círculos judaicos se ignora que el Mesías Yeshua era la encarnación de la cabeza del Adam Primordial, no de cualquier miembro. No era un Avatar más, sino el mero mero. El Logos o Mente Universal vino a llamar a sus miembros corporales espirituales perdidos por el planeta, atrapados no solo en la religión judía, sino fuera y dentro de muchas otras religiones: tengo unas ovejas que no son de este redil (Juan 10:16-18).
Y les digo que vendrán muchos del oriente y del occidente, y se sentarán a la mesa con Abraham, Isaac y Jacob en el Reino de los Cielos, profetizó el Maestro (Mateo 8:11).
Luego veremos por qué Yeshu honraba tanto al padre Abraham. Pero antes ha de comprenderse el origen divino de la verdadera esencia humana, perdida en el viaje por los mundos estelares.
Atman & Jiva, es decir, Adam & Java
En los Vedas el Yo Divino o Atman es comparado a un pajarito que disfruta de la dicha divina posado en la rama de un árbol junto con su compañera Jiva, otro pajarito, que representa el alma psicológica, reflejo del Atman en la corporeidad. Mas Jiva se distrajo comiendo de las frutillas del árbol, y se olvidó de Atman, cayendo en un olvido que le llevó al sufrimiento en la rueda de renacimientos o Samsara, anhelando el reencuentro de su Divino Gemelo, Atman.
¿Acaso no recuerda a la historia de Adam y Java/Eva contada en el Libro del Génesis? ¿No debía Adam comer del Árbol de la Vida, pero al no hallar ayuda idónea o cuerpos adecuados donde habitar, fue dividido por la Naturaleza en hombre y mujer, Ish e Isha? ¿No fue la mujer, el alma corporal-emocional, la que comió del Árbol del Conocimiento o Pasiones Físicas, custodiadas por la Serpiente, la inteligencia artificial del mundo psicosocial-físico?
¿Es casualidad que la Sabiduría hebrea mencione al Satán con el acróstico Sam, diminutivo de Samael, Veneno de El? ¿No será el Samsara la Rueda de Sam, que se hace esposo ilegítimo de Sara, otro nombre simbólico del Alma adámica atrapada en el espacio-tiempo, regido por los Sarim, Príncipes planetarios, como Saruman, Señor de los Anillos? ¿No era Sara la esposa y cuerpo de Abraham, tal como enseñan la Torah y el Zohar hebraico?
El Reino de los Cielos está extendido por toda la tierra y la gente no lo ve (Mateo 24:14)
De Brahma a Abraham
Es demasiada casualidad que en el mito de la Torah, Abraham aparezca con su esposa Sarah, igual que en la mitología hindú Brahma tiene como consorte a Saraswati, cuyo río tributario es el Ghaggar, similar a la sirvienta Hagar, la otra esposa de Abraham, quien da a luz a Ismael, de quien descienden los Ishmaelíes, que dan lugar al Islam.
¿Realmente siguen creyendo que son historias literales?
Bueno, ya está bien. Expoiler para aspirantes a iluminados:
Abraham viene de Aba, Padre y Raham, que es Elevado. Por tanto significa Padre Elevado.
Y Sarah en la historia bíblica primero es llamada Saray, mi Princesa, una alusión al alma psicológica, Jiva/Java, que se separó de su esposo espiritual.
De modo que Abraham casado a Sara y Brahma unido a Saraswati son un símbolo de la unión restaurada del alma psicológica al Adam no caído, la auto-conciencia del puro espíritu o Atman, que es uno con Brahman, el Fondo de Ser puro que se hace padre de la humanidad espiritual.
La historia védica dice que Brahma estaba tan enamorado de su esposa Saraswati que multiplicó su rostro por cuatro para verla por todas partes. Una alusión que recuerda al Tetramorfo hebreo y el Tetragramaton, lo Divino reflejado en los Cuatro Cuartos del Kosmos y los Cuatro Elementos.
Abraham fue de hecho llamado Padre de la Fe y de la progenie humana divina que halla la Presencia Divina en todas partes, ya que todo es Unicidad, Ejad.
Ahora, según el mito pobremente entendido por mentes indoctas, Abraham no sacrificó a su primogénito, es decir, su lado izquierdo, Isaac, la humanidad psico-carnal, como en cambio sí hacen los ascetas que niegan totalmente su cuerpo y se inmolan en meditación. Abraham elevó su humanidad, sacrificando el carnero de sus pasiones:
Por no haberme negado a tu único hijo, yo prometo bendecirte. Haré que tus descendientes sean tan numerosos como las estrellas del cielo, y como la arena del mar, que no se puede contar (Génesis 22:15).
Sin embargo, en el mito hindú, Brahma sacrifica a su hijo, y después lo resucita poniéndole una cabeza de carnero, que simboliza Aries, el Yo Soy en la carne.
En el Bagavad Gita también se habla de diversas corrientes evolutivas donde las gentes hacen sacrificios y ofrendas a Brahman, sin comprender que eso no es necesario, pues como le explica Krisha a Arjuna, la Liberación no depende de la Acción y sus Frutos. El Atman real está liberado de las cargas.
Esos malentendidos en la India se debieron a que muchos Brahmines y Yoguis llegaron a malinterpretar las enseñanzas primordiales, desarrollando la auto-negación total, el sacrificio del primogénito, enseñando a las masas la religión carnal.
Fue un hecho que decepcionó al propio Sidarta Gautama el Buda, quien buscó la Vía del Medio, tratando precisamente de rescatar el camino original del Brahman o Brahmayana, la cual se remontaba a tiempos remotos, cuando reinaban los famosos 7 Rishis o Sabios.
De acuerdo a la cronología bíblica, Abraham existió hacia el año 3800 a.C, coexistiendo con su enemigo, Nimrod, el Rey Cazador, símbolo de Orión, Constructor de la Torre de Babel, quien según la tradición oral hebraica, arrojó a Abraham al fuego, queriendo evitar la difusión de la Sabiduría Universal. Una alegoría que alude a cómo almas procedentes del sistema de Sirio obstruyeron la labor abrahámica de difusión de la Verdad. Aún así, Abraham salió ileso del horno, como todos los grades profetas.
Posiblemente Abraham es un código que representaba un linaje de humanos evolucionados, descendientes de los hijos de Shem, uno de los hijos de Noe. Los Shemitas eran los portadores de esa Conciencia Atmica, los sabios que sobrevivieron al Diluvio que destruyó la Atlántida y otras civilizaciones. Eran cofradías especializadas en mística, astrología, arte etc.
En la India a Noe se le conocía como Manu, que recuerda a Emanuel, uno de los nombres del Mesías, que también contiene el vocablo Man por cierto.
Y en el Génesis Abraham aparece sirviendo a Melqui-Tzedek, el Rey de Justicia, hijo de Salem/Paz, el Hierofante del Dios Altísimo, el Mesías divino de ese tiempo post-diluviano, a cuyo linaje perteneció el Mesías Yeshua: Pues del Mesías se da testimonio: tú eres oficiante para siempre según el Orden de Melqui-Tzedek (Carta a los Hebreos 7).
Todo ese trasfondo ampliamente ignorado está operando detrás de frases legendarias atribuidas al Maestro, como cuando los fariseos decían ser hijos de Abraham, y Él les contestó:
Si fuerais hijos de Abraham haríais sus obras” (Juan 8), les dijo el Maestro a los fariseos, a quienes llamó hijos de su padre el Diablo/Acusador, es decir, la carnalidad psíquica, no del Adam Primordial, Atman/Brahman.
Hay quien puede llegar a pensar que las enseñanzas hebraicas son una copia de las Védicas, pero es un error de razonamiento, ya que lo mas completo es siempre lo más original, y a las enseñanzas Védicas les faltan detalles importantes, razón por la cual en la India siempre ha habido muchos gurúes pseudo-iluminados, lo que Gurdjieff llamó el Santo Tonto.
La propia Escritura señala que Abraham dio regalos a los hijos de sus concubinas y los envió al Oriente (Génesis 25:6). Precisamente de esos regalos derivaron muchas enseñanzas orientales. No es para menos que en India a los hindúes se les llama Hudy, que es también un nombre Árabe que significa: el que elige el sendero correcto. Solo les falta añadir la Yud o Semilla del Padre Universal, para ser Yehudy, que no es judío en el sentido religioso, sino aquel que es una Puerta (Delet) para YHVH.
Sólo entonces se entienden las palabras del Maestro:
Vosotros adoráis lo que no conocéis; nosotros adoramos lo que conocemos, porque la salvación viene de los Yehudym (Juan 4:22)
De ahí se dice que los mistos sabios de Oriente, los Magos, que llegaban de la India, por cierto, rindieron pleitesía al Mesías. De nuevo, otra alegoría. No me sean tan tontitos de pensar literalmente en un Niño Dios en un maldito pesebre. El establo es este mundo. El pesebre es el cuerpo. Los tres magos son los tres centros interiores o los tres grados de Alma (Vital, Emocional y Mental), i.e Abraham, Isaac y Yakov.
Y les digo que vendrán muchos del oriente y del occidente, y se sentarán a la mesa con Abraham, Isaac y Jacob en el reino de los cielos, profetizó el Maestro (Mateo 8:11).
Se hace referencia por tanto a aspectos del Alma en evolución y retorno a la Fuente Padre, que no es un vacío, sino el Océano del cual viene el rocío de Bendición.
Esto también explica por qué la Escritura enseña que Abraham, Isaac y Yakov aún no conocían al nombre Universal como YHVH, sino sólo como El Shaday o Todo Sustentador.
Yo me aparecí a Abraham, a Isaac y a Jacob como El Shady, pero con mi nombre YHVH no me di a conocer a ellos (Éxodo 6:3)
Es decir, eran Almas de Sabios que comprendían la Sabiduría de la Unicidad Universal. Pero aún no estaban completadas para asumir la Presencia de Conciencia Plena.
Fue con Moisés con quien se desvela el YHVH como Seré el que Seré, Ehye Asher Ehye (Éxodo 3:14). ¿En quién Será? Eso ya lo enseñó el Maestro Yeshua, encarnando el Logos pleno y marcando el Camino de todos aquellos que se conozcan a sí mismos, y se reconozcan como parte del cuerpo existencial del Adam-Brahman, el Hombre Universal.
Haced como Yo, que soy sereno de corazón, y hallaréis reposo en vuestras almas. Pues fácil es mi Yugo/Yoga, y ligera mi carga (Mateo 11:29)
El yoga de Yeshu no es la mera unión al Atman para ejercer la liberación del Jiva, sino uno retorno del Atman reunificado a su Fuente Primordial para santificar o divinizar literalmente la materia, elevando este mundo a los arquetipos originales, realimentando el Cerebro Cósmico con una comprensión mayor que no estaba en el Atman/Adam del Gan Eden.
Eso le hace no solo Alfa sino también la OMega de COMprensión.
Literalmente, comprender esto es para que a uno le explote la cabeza.
La Vibración Cósmica OM & los Mundos
Por si fuera poco, al igual que en los Vedas el Brahma emite un Bramido o Vibración Cósmica simbolizada por el OM y el AUM, que representan tres estados cósmicos de consciencia: Sueño Sin Sueños, Sueño Onírico y Vigilia, de igual modo, en la Torah, el Nombre Sagrado YHVH, representa una Vibración o Palabra cósmica, también descrita en la Escritura como fuente de una Sabiduría (Proverbios 8) y Mente que es un Árbol de Vida (Proverbios 3), que por medio de Fuerzas Naturales/Elohim, se hace Generadora de la Existencia (Génesis 1). Nótese como al revés YHVH es Havaya/Existencia. Y sus fuerzas manifiestan tener un modo de pensar diferente:
Mis Pensamientos no son vuestros pensamientos (Isaías 55: 8-9).
El profeta Isaías transmitió que dicha Vibración Cósmica se hace Padre de todos los que llevan Su Nombre, en tres planos de Existencia:
A todos los llamados con mi Nombre, por medio de mi Esplendor, los Gesté, los Formé y los Hice (Isaías 43:7)
¿No recuerdan el Mundo de Creación/Gestación, Formación Astral y Acción física al AUM del Vedanta? ¿Plano Espiritual, Astral y Físico? ¿
¿Acaso el AUM no es Generador, Destructor o Sustentador dependiendo de quién y cómo lo manifieste?
Del mismo modo, en la Torah, la vibración de las Fuerzas/Elohim de YHVH, pueden matar o traer a la Vida. Por eso se dijo
No tomarás el Shem/Vibración del Generador Existencial (Yhvh Elohim) en vano (Éxodo 20:7)
Santificado sea Tu Nombre (Mateo 6)
Tomar el Nombre en vano es la falta del Vibrar de Conciencia que se refleja en mundos inferiores de modo imperfecto, porque hace real todo lo que toca, incluso el Eros y los Celos, sombra del Amor real; el Odio, sombra del apartarse de mal, etc
¿Está el Maestro en casa o todavía hay dudas? Bueno, veamos un poquito más.
El Artesano Cósmico o Demiurgo y su Progenie Galáctica
Veamos ahora la cuestión del Demiurgo, que tanto les gusta a los pimpollitos del neo-gnosticismo light que tanto abunda hoy día.
El primero en popularizar el término Demiurgo fue Platón, quien en su diálogo el Timeo, describe al Gran Artesano o Demiurgo como un Gestor que se limita a moldear el Universo plasmando en la materia los arquetipos que contempla en el mundo divino, que son patrones geométricos, matemáticos y musicales, igual que un pintor dibuja sobre un lienzo.
De ese modo, dice Platón, el Demiurgo estableció una relación entre el Alma y el Mundo, sin impedir por supuesto que surgieran tensiones y desafinaciones, igual que cuando los músicos tocan música con instrumentos afinados que se desafinan.
El mismo Pitágoras enseñó que el Alma del Mundo se rige por proporciones matemáticas que cuando adoptan cánones irracionales, se desajusta.
Pero en las corrientes Pitagóricas, Platónicas y Neoplatónicas, el Demiurgo no es un Dios Creador Divino y mucho menos negativo.
Es más, Plotino, el precursor del Neoplatonismo en el siglo III E.C, explicó en sus Enéadas que el Demiurgo es la Inteligencia Astral Almática que viene emanada del Logos/Nous, o Mente Cósmica.
Digamos que son los artesanos astrales y planetarios, entre los que se incluyen por supuesto las humanidades y sus chapuzas civilizadoras en la tierra y otros planetas.
Una de las representaciones más antiguas del Demiurgo lo muestra con cara de Leon, la Serpiente enroscada en su cuerpo de Hombre, sujetando una Escuadra y Vela Encendida, y unas Alitas, no sabemos si de Águila, aunque parecen más bien de Pollo gigante.
El caso es que es un Tetramorfo paralelo al clásico: Toro, León, Águila y Hombre. Son matices astrológicos diferentes.
Y lo cierto es que esa visión recuerda a lo que los Órficos llamaban Phanes, una deidad de Luz que nacía del Huevo Cósmico y quedaba atrapada en el mundo material, llegando a ser venerada en el Orfismo y Mitraísmo, el culto a Mitra o Sol Invictus.
Phanes era representada como un hombre encerrado en el marco zodiacal y enroscado en una serpiente.
Una imagen que recuerda al Adam gestado por Elohim.
No es casual tampoco el paralelismo hebraico entre el Alfarero y el Yhvh Elohim bíblico, las Fuerzas angélicas que forman a Adam del polvo de Adamah, el residuo de mundos previos destruidos. Y lo hacen por medio de 22 energías, simbolizadas por 22 letras, que son ni más ni menos que los Arquetipos Geométricos de los que hablaron Pitágoras y Platón.
Huelga decir que el Elohim o Demiurgo bíblico son artesanos angélicos que no están exentos de cometer errores porque pertenecen a un proceso de rectificación y pueden separarse de las directrices divinas. No todo Alfarero principiante comienza siendo experto alfarero, y hay aspectos de la Oscuridad entrópica que no son fácilmente predecibles.
De hecho, en la India existen visiones paralelas que recuerdan al Demiurgo, como por ejemplo la figura de Shiva el Destructor y su consorte Shakti, la energía dinámica del cosmos. O el mismo Purusha, Espíritu Universal que se convierte en el Cosmos.
Hubo Darshanas o Filosofías indias incluso más asépticas, como el sistema Samkhya Yoga, que habla de la unión o separación del Espíritu (Purusha) y Naturaleza (Prakriti), que se rige por tres fuerzas de la materia o Tres Gunas: Tatva, Rajas y Tamas.
Tatvas es el aspecto equilibrado y luminoso. Rajas es la agitación. Y Tamas lo inercial y pesado, como el aspecto Saturnino de la alquimia astrológica.
Las dos últimas son fuerzas mecánicas y entre ellas existe una polaridad o tensión que puede ser superada con el equilibrio luminoso dentro del aspecto fenoménico astral cósmico.
Hay de hecho versiones más negativas del Demiurgo que lo presentan como una Némesis u Opositor cósmico, como en algunas enseñanzas gnósticas, que lo describen como una Serpiente o Gusano con cara de León, otra alusión astrológica.
La figura del Demiurgo sólo es negativa en ciertas corrientes tardías del gnosticismo donde se centran en aspectos muy limitados, debido seguramente a una pésima comprensión de ciertos pasajes bíblicos, como Proverbios 9 o en las cartas de Pablo. Más adelante los veremos.
Por ejemplo, en el mito gnóstico el Demiurgo se conoce como Yaldabaoth (hijo del abismo, tehom), Saklas (Idiota) y Samael (Veneno de El). Y es engendrado por Sophía Achamoth, la Sabiduría inferior.
Dicha idea pudo ser tomada de Proverbios 9:
La Sabiduría (Sophía, de Serpiente/Ophis) construyó su propia casa, levantó sus siete pilares, puso su mesa (de sacrificios), mató sus víctimas, mezcló su vino...
Pero el error del falso gnosticismo es asociar el Gran YHVH o Generador del todo existencial, a dicho Demiurgo caído, ya que las energías demiúrgicas son solo el aspecto moldeador o artesanal de la Naturaleza, es decir, de Elohim, si cabe de Yhvh Elohim, que es la unión de las inteligencias angélicas en el Gran YHVH.
Entre los errores o experimentos demiúrgicos caídos se encuentran todas esas ayudas no idóneas a las que dio nombre Adam, pero que no llegaron a desarrollar la conciencia Adámica plena (ver Génesis 2).
Esas son precisamente muchas de las razas estelares que se hacen pasar por alienígenas avanzados con naves, cuando son meras humanidades del mundo astral, es decir, entidades interdimensionales cuyos merkabas atraviesan el tejido tiempo-espacio.
Algunas se hacen pasar por Federaciones Galácticas en son de Paz, y estando atrapadas en el tejido de la cuarta dimensión, viajan atrás y adelante haciendo creer a los humanos ingenuos que ellas están más evolucionadas. Cuando son meros hijos estelares que andan más perdidos que un pulpo en un garaje, sometidos además a regentes astrales que los mantienen presos en la 4D.
Diversas enseñanzas antiguas ya daban a entender que hay extensiones del Demiurgo que se desvíen de las ordenes y arquetipos Divinos, dando lugar a un mundo de sombras casi alejado de la mano de Dios.
Ahí estarían lo que Pablo el Apóstol, con una Sabiduría inusitada, llamó:
el Dios de esta Edad Temporal ha nublado la mente de los incrédulos (2 Corintios 4:4)
Como buenos unitaristas, ni Pitágoras, ni Platón ni Pablo de Tarso separaron a los Regentes Planetarios de las energías divinas. Si bien el Apóstol dijo:
No luchamos contra carne ni contra sangre sino frente a los Principados, Dominaciones, Kosmocratores de esta Oscuridad y los Espíritus malignos de las regiones celestes (Efesios 6:12).
Falsos sabios y desinformadores llegan a decir que Pablo era un corruptor de la enseñanza del Maestro, cuando su problema fue quizá dar en lenguaje críptico cabalístico demasiada información esotérica que luego se filtró al vulgo y fue robada por todo el atajo de animales que no ven más allá de sus narices cuando leen la Escritura.
Aunque muchas de las falsas Sabidurías caídas provienen de seres demiúrgicos que se hicieron Avatares o Guías sin tener legitimidad para ello y así desviaron a la humanidad de su propósito.
Así surgieron ciertas humanidades de oscuridad que descienden de la Serpiente del Gan Eden, los Hijos del Maligno a los que aludió Yeshua.
De ahí pueden derivar incluso gurúes que abusan del Vedanta sin comprender lo más mínimo qué hacen ni quiénes son. En muchos de esos casos son simplemente Adanes ignorantes que no han comprendido qué es vivir desde el Brahman sin sacrificar al Primogénito.
Por eso uno ha de escuchar la voz del Logos, y no de alienígenas desinformados o Nagas engañosas. En juego está ser hijos del Adam Primordial, o ramerillas de Sam en el Samsara, el corral de Satán.