Como hemos estado viendo, las enseñanzas espirituales del mundo se quedan siempre a medio camino. Nos hablan de cuerpos y niveles espirituales, de iluminación y cuántas cosas más, pero casi ninguna alcanza a comprender que el propósito del ser humano en la tierra es ser Cuerpo manifestado del Hombre Primordial, una expresión completa del Gran Ser, y por tanto la manifestación de la Luz del Absoluto Ser Sin Límites, emanador del Amor supra-condicional, la Vida no alterada, la Conciencia integral y la Serenidad.
Si recordamos, tanto la capa física, la energética, emocional, mental-intuitiva y de beatitud, son ilusorias. Y seguramente habréis oído hablar del cuerpo astral, el cuerpo causal, el cuerpo etérico…Pues bien, en general hay mucha confusión, pero les diré que ninguno de esos cuerpos es el verdadero Cuerpo Primordial que estamos llamados a recibir y gestar los que tenemos ya semilla de Conciencia Original. Pero para que podáis comprender eso, hay que quemar la paja.
Por un lado tenemos lo que en Occidente los alquimistas llamaron Cuerpo Astral, que se forja con substancias de los astros, y es una configuración que my pocas personas desarrollan plenamente. Recibe muchos nombres, pero es básicamente la unión de lo energético, psíquico emocional y lo intuitivo mental.
Puede considerarse como el Merkaba o carro inferior que reúne nefesh, ruaj y neshemah del Alma del Adam caído, en la Kabalah hebraica.
En India lo llaman cuerpo sutil o Sukma Sharira, que abarca la capa energética o pranamayaksha, la capa psicológica o manamayakosha y la capa intuitiva o vijnamayakosha.
Y luego se habla de un Cuerpo Causal o Akáshico, donde se almacenan “causas”, “raíces” de hábitos mentales, emocionales y físicos. Es donde tratan de acceder los que hacen regresiones hipnóticas. En India lo llaman Karana Sharira y se asocia a la quinta capa, la Beatitud o Dicha.
Luego existe una sexta capa llamada Atman en India, Primer Adam en el Génesis, donde se dice que Adam recibió el soplo de mente vital, o Nishmat Jayim. Atem en alemán es respirar, y se relaciona con lo Atmosférico. Y Atman es el Espíritu divino en el Vedanta Indio, y es el dios solar Atum o Atón en Egipto, donde se le adoraba como On en Heliópolis, el Templo del Sol. En Grecia se hablaba del to on, el Ser, como lo que une todas las cosas.
Sin embargo, el Espíritu del Mundo se convirtió en Alma del Mundo, porque cayó, como el Adam Nefesh Jayah o Adam de Vida que se convirtió en Adam Ish-Isah y Adam-Jawah, Madre de todas las criaturas con Psique Viviente. El Espíirtu estaba tan desnudo como Adam Hombre-Mujer en el Jardín. Le faltaba el soporte del cuerpo primordial. Aunque muchos se buscaron un cuarto cuerpo espiritual de reemplazo haciendo uso de la energía de la serpiente y lograron generar la ilusión de iluminación.
Y muchas enseñanzas aseguran que la sexta capa ya está liberada, o bien que tiene que liberarse limpiando las capas anteriores, y que ya es uno con lo Absoluto, y que si lo percibes, ya puede uno decir: Yo Soy Eso, Yo Soy Dios, Yo Soy lo Absoluto.
Y bueno, quizá es uno con el Dios del Mundo, la Mente Madre, el Creador de este universo caído. ¿Y qué sentido tiene adorar lo que ha producido tanto caos? Pero ojo, no me malinterpreten, no estoy condenando. Sólo digo que eso no es el Ser Primordial en su forma Original. Es más, enfatizo, el Espíritu y Alma del Mundo deben sanarse y ser devueltos a su fuente. Pero eso requiere trabajo y discernimiento interno.
Muchos pensadores y místicos, en su falta de comprensión, han creído ser lo absoluto y mónadas o seres unitarios, sin manifestar apenas la mitad de la unicidad de Amor, Vida y Luz serena del Ser Original. Y en su exceso de intelectualismo religioso, filosofan sobre Dios, el Alma y el Mundo, encerrándose en ideas vanas sobre los niveles de Consciencia, la necesidad de hacer reparación, meditaciones y afirmaciones sin una visión clara, desarrollar cuerpos sutiles para ser Dios o dioses y diosas creadoras, etc. En todas las religiones y espiritualidades hallamos eso. Pero ninguna ha dado resultados visibles, pues hasta hasta los seguidores de Dios, o un Mesías aseguran ser “pecadores e hijos de Dios” –¿cómo se come eso?; hasta los más iluminados aseguran tener que reencarnar para pagar karma, hasta los Justos judíos aseguran tener que reencarnar en peces para acabar de hacer tikún (reparación), sin contaminarse con el mundo –¿cómo se come eso?; hasta los gurús más destacados han hallado la muerte sin saborear el verdadero Ser de Vida, creyendo ser ellos mismos una nada impersonal, o lo Absoluto, o cuántas locuras más que no tienen ningún sentido en un mundo que se desmorona, con 3/4 partes de la población sufriendo en guerras, pobreza, locuras, aberraciones, y eso sí, con ayuda de mucha religión, política, doctores, científicos, y demás pandilla de iluminados. ¿Se han parado a pensar que algo falta?
Las ideas del mundo no conducen a un desarrollo del verdadero Hombre interior, con Voluntad, Conciencia y Unicidad y Unidad primordial. Ser con mayúsculos no es ser una consciencia impersonal y abstracta, como promueven en las filosofías y misticismos naturalistas o chamánicos, o en mezclas modernas, tales como el Curso de Milagros, que incluso niegan la existencia del Adversario. Pero tampoco es ser una persona del mundo, con creencias en este Dios o aquel Santo. Eso es vivir en Alicia en el País de las Maravillas, dirigida por señores con rabo y cuernos escondidos.
¿Para qué buscar nuevas filosofías y enseñanzas cuando la Enseñanza de Luz Original ya fue expresada ya por el hombre a quien muchos llaman Yshua, Iesou…? Como Él dijo:
Si tu Ojo es completo, todo tu cuerpo se llenará de Luz.
En cambio, los ojos de la carne tergiversaron las escrituras y enseñanzas. Incluso las enseñanzas de Buda, el Despierto se falsearon. Los budistas no conocen a Buda, quien aún andaba un paso por detrás de Igualmente, los cristianos romanizados y judíos tampoco conocen realmente al verdadero Mesías u Hombre de Comprensión, que es lo que significa ser Mesías. Todos hablan de “falsos mesías externos”, “salvadores vicarios” que han o no han llegado, según el gusto de cada ideología. Nadie quiere asumir la responsabilidad de ser miembros en el Cuerpo Colectivo de Seres con comprensión, pues muchos duermen en religión, política, ciencia luciférica y cultura de entretenimiento. Más como dijo Paulo:
Despiértate, tú que duermes, y levántate de los muertos, y te alumbrará el Ungido de Conciencia Original (Efesios 5:14)
Esto es el primer paso para comenzar a crecer como hijo del Hijo de Adam, que es un código de desarrollo, no una ocurrencia teológica. No quiere decir mero humano, ni hijo de la humanidad, como muchos van enseñando por ahí. Como dijo el Maestro, el Hijo de Adam debe ser levantado como la Serpiente en el desierto y es el que siembra la buena semilla de Conciencia para que crezca y produzca buenos frutos. Llegaremos a ser Hijo de Adam levantado cuando nuestro Alma de Conciencia original no sea mera semilla, ni embrión, ni bebé apegado a pezones religiosos, sino Niño que camina, come alimento de Luz y crece hasta hacerse Alma Hombre, la Mente del Mesías que crece desde el llamado Reino de los Cielos o Malkut ha Shamayim, que en la Sabiduría hebrea se asocia al Malkut del plano mental de Beriah, y por tanto tiene que ver con desarrollar la Mente original sobre un cuerpo emocional:
Las zorras tienen guarida, y los pájaros nido, pero el Hijo del Hombre no tiene dónde reposar su Cabeza (Mateo 8:20)
Y la meta es crecer con cuerpo vital, corazón y mente integrados en el Cuerpo Primordial del Adam Kadmon, cuyo Espíritu está fusionado con lo Infinito, su Alma es la Imagen Original y su cuerpo son seres átomos neuronales de Luz. De esa configuración sale emanada nuestro espíritu, alma y cuerpo original, que llega a nosotros desde lo más profundo. No tenemos que alcanzarlo. Más bien hemos de dejar que nos alcance.
Pero de esto ya hablaré más en profundidad, respondiendo a preguntas más profundas que algunas personas me plantean. Seguramente abriré una sección especial para ello. Bendiciones.
Discernimiento interno. Clave entre claves.
ResponderEliminarLa Llave de la Conciencia, que decía el Maestro. Y rara vez conocida incluso por supuestos expertos. SaLuz
Eliminar