El siguiente escrito me vino inspirado tras escuchar un discurso del psicólogo Jordan Peterson [1], quien no examina el narcisismo meramente desde el ámbito psicológico, sino que reconoce hay una dimensión espiritual muy oscura operando detrás.
Como señala Peterson, la personalidad narcisista no es meramente un personaje egocéntrico, sino que está guiado por un tipo de espíritu demónico manipulador, lo que hace a esa personalidad aparentemente más inteligente.
De modo que lo primero es comprender cómo opera, y nunca rebajarse a su nivel de manipulación, que es por medio del intelecto retorcido, los argumentos y las discusiones e incluso la incitación a la agresividad y la confusión.
Busca robar, matar y destruir a las personas, por medio del control y manipulaciones altamente elaboradas que llevan a la duda, la ansiedad y el agotamiento de la persona que tienen enfrente.
Su objetivo principal son personas empáticas con mucha Luz, porque busca opacarlas con las Tinieblas y destruir su esencia, empleando incluso el amor y empatía que donan como un arma contra ellas mismas. Porque el mismo Acusador (Diabolos) finge dar y necesitar amor para llevarte a su terreno.
Las aparentes muestras de atención y cariño de la personalidad narcisista son meras tácticas para ganar la atención de la persona empática, a la que finalmente logra minar con argumentos en su contra.
Primero te estudia, averigua lo que le pides, y te lo da por un tiempo, para echarte un lazo aún más fuerte.
Pero como odia la Verdad de tu esencia pura, tratará de manipular toda situación para voltearla contra ti, convirtiéndote en culpable, obligándote a permanecer bajo su control, en su entorno, donde todo está muy bien calculado para que sea difícil salir de allí.
En ese proceso tratará de convencer a su círculo de amigos de que todo marcha bien o de que tienes un problema que está ensuciando vuestra relación.
Aunque pueda parecer servicial en algunos casos, la personalidad narcisista desprecia las necesidades de los demás y se alimenta de tu energía. Por ello, justo cuando estés cansada/o, o bien centrada/o en lo que más te gusta y te hace crecer, te propondrá cosas que te demandan mucha energía o desviará tu atención.
Las discusiones con la personalidad narcisistas serán agotadoras porque siempre hallará razones para voltearte y culparte. Por medio del gaslighting o manipulación de realidad, cambiará la visión de los hechos para que dudes de tu propia realidad y memoria de los hechos. Creerás que estás equivocada/o, que quizá exageran al decir que te están manipulando.
Lo que más le mueve a la personalidad narcisista son las energías intensas y los cambios, para confundir y marear a sus presas. Esto hace que le guste mucho viajar o moverse en diferentes entornos donde pueda alimentar su espíritu.
Le importarán más los lugares e imagen que da ante los demás, por lo que te llevará consigo como un objeto y prestará más atención a sus propios gustos de viaje y las personas de su círculo cercano, ante las que construye una falsa imagen para aparentar ser bueno y cuidadoso.
Necesita ser el centro de atención, por lo que generará problemas o criticará pequeños detalles si es necesario.
Nunca se dirige a tu esencia real al hablar contigo, sino que te fuerza a identificarte con lo más bajo en ti. Por eso te hará comentarios ofensivos y culpabilizadores: eres celosa/o, eres orgullo/o, soberbia/o, insensible…
Y si empiezas a despertar, lo primero que hará será atacar tus fortalezas:
Si tratas de protegerte con valentía, poniendo límites saludables, te dirá que eres débil y que no aceptas la crítica de algo obvio.
Si le criticas, te atacará diciendo que eres ignorante, que no conoces nada.
Tu agotamiento lo considerará debilidad
Tu bloqueo mental y confusión lo achacará a tu incapacidad para comprender.
Si le abandonas, te acusará de ser cruel, desleal, desagradecida, presumiendo de haberte dado esto y aquello.
Tu alejamiento lo tachará de abandono inmerecido.
Él/ella siempre será la víctima, y te hará culpable, obligándote a pagar con el pesar de tu alma, ayudándole o siguiéndole.
El espíritu del narcisista se alimenta de las dudas y la confusión, por lo que no se le puede derrotar en el terreno de la argumentación.
Si se ve muy amenazado ejercerá críticas para desestabilizarte emocionalmente e incluso conseguir que reacciones de manera violenta.
Por tanto, sólo se le comienza a derrotar no reaccionando a sus tácticas.
Sólo se le puede vencer con el trabajo de consciencia, la oración y la meditación enfocada en romper las cadenas de oscuridad. Sobre todo apostando por desarrollar la propia esencia de verdad, alejándose lo más posible de sus tácticas, cortando la falsa relación que nunca existió, sin reaccionar, sin seguir sus juegos mentales.
Durante los períodos de confusión se recomienda incluso el contacto cero a todos los niveles, ya que incluso una mirada o una pequeña conversación puede desencadenar procesos de adicción al lazo traumático.
Desde el mismo instante en que determinas cortar con un personaje así, bajo el amparo de la Luz de Verdad divina, la victoria ya está asegurada, porque la Oscuridad sólo tiene poder sobre ti cuando le das autoridad y crees sus mentiras.
Tal como señaló el Apóstol Pablo:
Porque nuestra lucha no es contra sangre y carne, sino frente a principados, potestades, los poderes de este mundo de tinieblas, las huestes espirituales de maldad en las regiones celestiales (Efesios 6:12)
No por la fuerza ni por el poder, sino por mi Espíritu, dicen las Fuerzas del Verbo Existencial (Zacarías 4:6)
Pero debes saber esto: que en los últimos días vendrán tiempos difíciles. Porque los hombres serán amadores de sí mismos, avaros, jactanciosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, irreverentes, sin amor, implacables, calumniadores, desenfrenados, salvajes, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, envanecidos, amadores de los placeres en vez de amadores de Dios; teniendo apariencia de piedad, pero habiendo negado su poder; a los tales evita. Porque entre ellos están los que se meten en las casas y llevan cautivas a mujercillas cargadas de pecados, llevadas por diversas pasiones, siempre aprendiendo, pero que nunca pueden llegar al pleno conocimiento de la verdad (2 Timoteo 3:1-7)
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[1] https://youtu.be/ctuuQAJ_dTg?si=kK6USYdcSU_9W6vm
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