Como ya vimos la Llave de Conciencia que nos da acceso a las 6 virtudes del Alma divina: la misericordia, el buen juicio que nos hace emplear bien la fuerza; el sentido de armonía, proporción, que es la Belleza, lo cual nos ayuda a tener la compasión que comprende el propio dolor y el de los demás; la vitalidad que nos hace tener éxito, la consciencia que nos ayuda a vernos y mostrarnos como somos y la creatividad, la transformación de la energía.
Y hay otras tres virtudes, como la Fe, la Esperanza y el Amor. Pero sólo hay un estado de conciencia donde están integradas y armonizadas, y fue perfectamente expresado en diversos pasajes:
El asombro reverencial del Ser es Sabiduría y apartarse del mal inteligencia (Job 28:28)
Vivir la plenitud de lo que somos con confianza o Fe implica percibir los matices sutiles en el vivir cotidiano. Por ejemplo, sentir el asombro ante lo sublime a cada momento, el Amor que fluye en la Vida luminosa, nos hace percibir otras cualidades, como la unicidad, la belleza, la gratitud, la humildad, la inmortalidad… Lo podemos percibir en un gesto de amabilidad, un niño entusiasmado, el agradecimiento a unos padres por toda una vida de aprendizaje…
Y sentirlo eso nos hacer sentir que somos destinados para ese momento, siendo y haciendo aquello que estamos destinados a ser y hacer, saliéndonos del sendero de la destrucción.
Ahora, esto se relaciona con lo que en un nivel bajo de conciencia lo suelen traducir como Temor del Señor, Yirat Yhwh. Algunos dicen que es temer ofender a Dios. Más cercano sería decir temer hacer daño a lo Divino que mora en nosotros y los demás, temer apartarnos del Amor. Pero como dijo el apóstol Simón, en el Amor no hay temor. Así que es más bien un sentido de asombro y humildad reverencial que nos hace apartarnos de la destrucción.
Y esto es parte de la esencia del Tetragrammaton. Sus cuatro letras, Yud, Hei, Vav, Hei reflejan los cuatro pasos de manifestación: intención, organización, formación emocional y manifestación. El Verbo divino hace real todo lo que toca, según la intención inicial.
No por casualidad se dijo: no tomarás el Nombre de Yhwh Elohym en vano (Exodo 20:7).
Y muchos se preguntan: ¿Qué nombre? ¿Nombre de quién? ¿Por qué no debe tomarse en vano?
Bueno, en hebreo un nombre, shem, no es una etiqueta que se pega sobre alguien, sino una vibración que determina la esencia de algo. Y Yhwh significa básicamente Ser pleno, pues viene de Hawa: existir y permutado da Hawayá: Existencia. Contiene de hecho las formas: Fue (Haya), Es (Hovve) y Será (Yihie).
Quiere decir que Yhwh es siempre. Y eso es precisamente el significado de Amor,A-mort, ausencia de muerte, palabra que viene de las lenguas romances provenzales.
Y ser in muerte implica que es Vida, la cual se revela, cual Luz de Conciencia, lo cual conduce a la Serenidad sin tiempo. El Padre de Luces es sin sombra de variación, dijo Jacobo. De modo que la vibración de Yhwh es Yo Soy siempre inmortal y auto-subsistente, Fuente de todo Ser amante, viviente, luminoso y sereno. Por ello se le llamó Padre de Luces.
Y esas cualidades son Ser en sentido pleno. Incluso Pablo dijo a los griegos que los seguidores del Mesías Universal adoraban al dios desconocido, al que los griegos erigieron una estatua sin nombre. Y obviamente era el famoso Ser de los sabios helenos. El venerable Parménides, en el siglo V a.E.C, hizo un poema donde decía que lo único absolutamente real es el Ser uno y completo, mientras que lo que sentimos con los cinco sentidos es relativo porque se desvanece.
Y lógicamente Pablo añadió: en Él vivimos, nos movemos y somos…linaje suyo (Hechos 17:28).
Y su Vibración de Amor y Vida de Luz serena no debe tomarse en vano porque cuando falta una sola de sus cualidades, Elohym, las fuerzas del Verbo Divino, surge la sombra de la Existencia Yhwh. De hecho, Hwh, Hoveh, significa ruina y calamidad.
Yo Soy Yhwh, el que genera la luz (electromagnética) y forma las tinieblas (Isaías 45:6-7).
Por tanto, el mismo ocultamiento de Conciencia lleva a la Sombra de la existencia.
Por ejemplo, si hay Amor en nosotros pero no se manifiesta bien la Vida ni la Conciencia de Luz serena, surge un deseo insaciable que nos destruye, porque no se reconoce sí mismo.
Si desarrollas lo que llevas dentro, los que llevas dentro te salvará; si no desarrollas lo que llevas dentro, lo que llevas dentro te destruirá (Evangelio de Tomás).
La Vida desconectada del Amor y la Luz serena, se vuelve Oscuridad dolorosa, rencorosa y agitada.
La Luz sin Amor de Vida luminosa es un juego de luces y sombras, una simulación llena de caos y agitación, falsa Sabiduría y Conocimiento a base de datos externos.
Por otro lado, nadie ni nada existe aparte del acto de Ser. Hasta lo irreal parece real cuando decimos que es esto o aquello: siente Yo Soy oscuridad, y te harás oscuridad por momentos; siente Yo Soy débil, y te haces débil; siente Yo Soy en el Gran Yo Soy Pleno, y saborearás tu Ser divino, aunque sólo sea un destello. Comprende que tú no eres. Sólo entonces verás que Eres porque el Gran YO SOY es ti.
Antes que Abraham fuese: Yo Soy (Juan 8:58)
wLas mismas palabras Yo SoY, Seres y Somos son palíndromas, se leen igual al derecho y al revés.
Ahora bien, cuando el Ser no es unívoco, sentimos Yo Soy en Orgullo, y nos vemos como algo separado desde la carencia, demandando algo: soy enfermo dame salud, soy superior, soy inferior, dame tu atención, soy pecador, dame perdón, soy víctima, dame cariño…
Y esa actitud nos convierte en objetos y no seres. Curiosamente, en latín cosa es res, y la misma sociedad trata a las personas como cosas, como a reses, ganado…
Esto viene del sistema babilónico que paso a Grecia y Roma, lo opuesto al Amor.
Sintamos pues Yo Soy Seres Somos, al derecho y al revés.
El Ser es Uno y homogéneo expresó el poema del venerable sabio Parménides, al que nadie entendió. Una verdad reflejada hasta en la oración hebrea más famosa:
Escucha Israel (Almas que vencen la oscuridad) el Ser Pleno (Yhwh Elohym) es un Ser Unicidad (Yhwh Ejad)–Deuteronomio 6.
Precisamente, en hebreo Ahaba (Amor) tiene el mismo valor numérico que Ejad (Unicidad), y es 13, como el valor de Einai, que es Ser en griego.
13 es la Semilla que contiene los 12 frutos del Árbol de la Vida; el Espacio que abarca las 12 aristas de un cubo…
Al sentir el espacio de plenitud que no rechaza, vemos que no es posible escapar a la Realidad Amante que abarca y conecta todo en Unicidad (Ejad) haciendo la Vida fluir hacia la Unidad (Yihud).
Ya veremos cómo esto se traduce en la verdadera Fe y Esperanza, frente a las falsas.
Diferentes tipos de espiritualidades han hablado siempre de conectar con el Yo Real. Hoy en día hay incluso el teórico Jean Garnier Malet sugiere la existencia de Doble Cuántico que cada persona tiene, un ser multidimensional que puede ver todas nuestras líneas de tiempo y comunicarnos el camino para los mejores futuros o despejar para atraer la mejor versión de nosotros. Y no digo que no haya verdad en esto. Sin embargo, en todas estas visiones podemos ver que hay una mezcla de verdad y mentira que llevan al error.
En primero lugar, conectarse a algo que conoce detalles del futuro o información sorprendente de registros akáshicos, no es garantía de verdad, pues hay falsos guías.
Ciertamente, el Alma Divina puede conectarse a las líneas de tiempo y guiarnos, pues es nuestro Ser, pero no es cuántica porque no pertenece al espacio-tiempo.
Por eso lo más aconsejable aproximarnos a nuestro ser con el esquema del Árbol de la Vida, que es el Alma Divina. Y hacerlo desde la visión del Maestro Yeshua/Iesou, es aún más completo, ya que Él es el Árbol mismo: Yo Soy la Vid y vosotros las ramas (netzarim).
Tradicionalmente la Kabbalah hebrea considera que hay grados de devekut o comunión divina. Se puede ser Esclavo de Elohim, Siervo de Elohim, Novia de Elohim, Hermano de Elohim, Amigo de Elohim y Esposa de Elohim. Y los eruditos van de abajo arriba en el árbol sefirótico. Pero al asumir que somos cuerpo del Mesías, unimos lo de abajo con lo de arriba y vamos siempre desde nuestro centro, que es el Bendito Ser mismo, teniendo ya a disposición Su Voluntad, Su Conciencia y Su Personalidad. Él en nosotros es lo que tenemos que descubrir, dejando que se exprese.
En general la gente es esclava de Elohim, las fuerzas naturales desbocadas, como la Serpiente, Najash, que es un deseo insaciable lleno de orgullo y ansia de destrucción por frustración. Sin embargo, en ella yace un potencial de transformación, porque si no se transforma, hay destrucción. El orgullo es la piedra de cambio.
Así, incluso en este Reino de Muerte, Malkut, yace la semilla de Vida en forma de Shekinah dormida, Presencia Divina latente.
Por eso, Yhshua nos insta a que hallemos dentro el Malkut ha Shamayim, la Esfera Fundamental del Alma Divina. Neshemah y haShamayim tienen el mismo valor gemátrico, 395.
Y una vez entramos en el Fundamento del Árbol de la Vida, ya no somos esclavos de Elohim, las fuerzas naturales no nos emplean como recurso cuando estamos bajo las alas del Espíritu de Vida. Más bien somos uno con nosotros mismos.
Y al estar conectados a la Conciencia Universal, no somos siervos, sino sirvientes de Elohim, porque realizamos un trabajo de servicio interior y exterior que libera y armoniza las energías. La Naturaleza es beneficiada con nuestro trabajo interior y nos ayuda, pues básicamente transformamos la Energía de la Serpiente destructiva, que pasa a ser luz vital purificada, haciendo de receptáculo divino. Se despierta así la Shekinah o Presencia Divina, trayendo serenidad, incluso buenos olores.
Y este trabajo se representa con la Esfera de Hod (Esplendor/Consciencia), donde encendemos las Luces de la Casa interior, como en la parábola de la mujer que tiene diez monedas, enciende la luz y barre para encontrarla. Esto es conocer cada parte del cuerpo y la mente, viendo cómo ciertos pensamientos negativos desencadenan ciertas emociones y acciones, por qué comer mucha comida insana genera depresión, falta de vitalidad, etc.
Y cuando este trabajo de consciencia emerge, entonces se produce una armonización emocional que nos eleva. Es la Esfera de Netzaj, el Éxito.
En la Torah Netzaj es Moshe, Hod es Aaron, y la energía vital e imaginativa de Yesod viene representada por el manto multicolor de Yosef, ya que alude a los colores del cuerpo energético. La sublimación genera incluso olores perfumados, como el olor a rosas.
Pero Yesod es también la esfera de la Novia (Nukva), la Doncella en la Torre, que debe ser alcanzada por el Novio (las primicias de Conciencia/Israel), ya que ella guarda su rebaño en la torre Migdal. Y cuando se vuelve receptiva la Novia, el triángulo Netzaj, Hod, Yesod deja de apuntar hacia abajo, uniéndose a Tifereth (el Novio), apuntando hacia la Conciencia Universal (Da´at Elyon), lo cual genera una ola de elevación emocional, fruto del vortice Merkaba, que eleva la frecuencia de vibración.
Y en Tifereth, la Belleza interior, tenemos una esfera de auto-reconocimiento, donde comenzamos a sentir nuestro origen divino y sus virtudes: compasión, calma, amor incondicional…Aquí la mente y cuerpo divinos comienzan a manifestarse juntos. Y a ese estado de conciencia se le da el nombre de Israel.
Sin embargo, hay fuerzas oscuras que ven la Luz y de inmediato quieren reducir el nivel de vibración. Comienza entonces la fricción.
En mitos antiguos esto se ve con la lucha entre hermanos, Enki vs Enlil, o Jacob vs Esau, etc. Jacob incluso lucha contra el hombre interior, su elohim propio, y al vencerle, recibe el nombre de Israel, que significa Yashar El, Esfuerzo hacia El, o Vencedor de fuerzas Solares (Ra), fuerzas lunares (Isis) y fuerzas planetarias (El).
Y la victoria sólo puede tener lugar en Tifereth.
Y cuando llega la serenidad (Shalom), la lucha cesa, y somos Amigos de Elohim, como Abraham. Vemos entonces la unicidad de las cosas. De hecho, el Sefer Yetzirah muestra la relación de todas las cosas en la Matrix: cuatro, elementos, días, meses, letras hebreas…
Eso es básicamente el Dios o Elohim de Abraham, El Shaday, la Naturaleza proveedora, pero de un universo modificado. El mismo mundo es objeto de adoración en la New Age y las Teorías Cuánticas, que no conocen el Kosmos Original donde no hay fragmentación ni mátrix cuántica.
La unicidad de abajo sólo es un destello de la unicidad de arriba. Y eso lo vemos con la Mente del Mesías, Da´at Elyon, la Conciencia Universal, la unión de la Sabiduría intuitiva que nos aparta de la destrucción, y la Comprensión (Bynah), donde los opuestos comienzan a integrarse. Entonces reconocemos la unión plena con nuestro Ser. Mas no somos Esposa de Elohim, pues en la Unicidad ya no hay ni hombre ni mujer.
Nuestro Yo más profundo está sentado en regiones celestiales y nos guía cuando escuchamos su voz silenciosa, por medio de intuiciones, visiones…Podemos incluso percibir otras líneas de tiempo y existencias, pero sin quedar atrapados en ellas.
Esto es comunicarnos con los centros superiores de Conciencia, que son cuerpo el Corazón contemplativo y la Mente de Luz, que nos muestra las esferas donde todo es Luz.
Yeshua era incluso capaz de conectarse a la Luz primordial desde el cuerpo, pues su estado de Conciencia era Yehidá. Huelga decir que en la comunión con nuestro Ser necesitamos cultivar el silencio, la humildad y la atención, armonizando cuerpo, mente y emociones, o incluso visualizando con Imaginación iluminada. Sólo así seremos capaces de escuchar las intuiciones, recibiendo todo lo que estamos destinados a manifestar. Pero no debemos convertirlo en técnicas rígidas ni rutinarias, pues la Vida del Árbol interior es espontánea.
Como vimos la semana pasada, el Aguador, Acuario, se asocia al arquetipo del Hijo del Hombre que trae las Aguas de Sabiduría y Comprensión, limpiando y fusionando consigo nuestra mente y corazón humanos, saciando nuestra sed. Y su crecimiento en nosotros nos ayuda a establecer una relación consciente con nuestro Ser de Luz primordial y su origen. Pero hemos de derribar las falsas concepciones del alma caída, con sus pensamientos y sentimientos torcidos.
No por casualidad, Acuario también va asociado a la destrucción del templo y la construcción del nuevo. Por eso en Marcos, que contiene el ciclo de 13 lunas y 12 signos zodiacales simbolizados en sus episocios, el pasaje que inaugura Acuario es la destrucción del templo, mientras que el pasaje que cierra el ciclo acuariano es donde el Maestro menciona al hombre con el cántaro de Agua, al que los apóstoles debían seguir para ir al piso de arriba de la casa, a los centros superiores de conciencia.
Ahora, al comienzo del ciclo, el Maestro les dice: ¿Véis todas estas grandes edificaciones? Pues no quedará piedra sobre piedra.
Y en el Evangelio de Juan habla de modo similar:
Destruid este templo, y en tres días lo levantaré. Entonces los judíos dijeron: En cuarenta y seis años fue edificado este templo, ¿y tú lo levantarás en tres días? Pero El hablaba del templo de su cuerpo.
Y no precisamente su cuerpo físico, sino el cuerpo colectivo. Mientras que esos tres días deben entenderse como milenios. Por tanto, dado que ya han pasado dos días, dos milenios desde la primera manifestación del Mesías, ya estamos entrando en el tercer milenio, y el cuerpo colectivo de mesías ya se está levantando. A él pertenecemos muchos.
Así pus, debemos entender esta relación de Cuerpo y Cabeza cósmicos, que se expresó con códigos ancestrales, como el de Padre, Hijo y Espíritu de Inspiración Purificadora, ya que Ruaj ha Kodesh es esa inspiración que conecta mente y cuerpo, generando serenidad, amor, vitalidad, unicidad, libertad, dicha…todo frutos del espíritu.
Y de sobra es conocida la orden que el Maestro les dice a los Apóstoles al final del Evangelio de Mateo 28:
Id a todas las naciones y haced discípulos bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu de Inspiración Purificadora, enseñándoles que guarden las cosas que yo os he mandado [no lo que manda el judaísmo o lo que mandan ahora las iglesias]. Así que es necesario comprender a qué Padre, qué Hijo y qué Espíritu se refiere, y qué tipo de bautismo. Y qué es “en nombre de”.
En la religión sólo se conocen enseñanzas carnales, y les vale con mencionar un nombre y luego hacer ritos, como el bautismo convencional de agua, y como veremos se relaciona más bien con el Ba, que en egipcio es la mente espiritual encarcelada en el mundo, como luego veremos.
En cambio, el verdadero bautismo del que habló Yeshua son tres funciones de un mismo Ser Divino dentro de nosotros. La expresión “en el nombre de” se dice: beyt Shem, que literamente significa "dentro de el estado de vibración". Como en el pasaje de Joel 2:32> Todo aquel que invocare [que se comporte] en el Nombre de YHWH, es decir, en estado del Ser Divino, será salvo.
Y esta realización del Ser es un bautismo de conciencia, sin ritos. El mismo Pablo lo dijo:
Hay un solo Amo, una sola fe, un solo bautismo; hay un solo Ser Divino y Padre de todos, que está sobre todos, a través de todos y en todos (Efesios 4:5-6)
Porque todos los que fuisteis bautizados en el Mesías –la Conciencia Universal–, os habéis revestido del Mesías (Gálatas 3:27)
Es decir, no basta siquiera con tener idea del Padre Origen y del Hijo emanado, sino que hay que manifestar la nueva naturaleza o espíritu unificador que nos hace Seres de Luz sin mancha, aquí en la tierra.
Es posible ser bautizado por medio de ritual en el nombre del Padre y del Hijo, pero no de manera efectiva. Algo que las iglesias no comprenden y no pueden comprender, pues son organizaciones satánicas.
La diferencia de los tres códigos la vemos en Hechos de los Apóstoles 19. Pablo se encuentra con unos doce hombres, discípulos de Yojanan, y les pregunta si han recibido el bautismo del espíritu purificador o ruaj ha kodesh. Y al ser judíos dicen tener sólo el Bautismo de Yojanan, pero sin conocer ese Espíritu de Purificación. Y Pablo les dice:
Yojanan bautizó con el bautismo de teshuvah/metanoia [volteo de consciencia], diciendo al pueblo que creyeran en aquel que vendría después de él. Cuando oyeron esto, fueron bautizados en el nombre del Maestro Yeshua.
Y después les impuso las manos transmitiéndoles el Espíritu purificador que les hacía hablar en lenguas y profetizar. Por norma general, la gente malentiende esto, cryendo que fueron poseídos por un Espíritu Santo que les hacía hablar lenguas raras, como sucede en la brujería religiosa. Pero hablar en lenguas simplemente significaba que adquirían el don de transmitir la verdad y ser comprendidos por gente de otra lengua, ya que el lenguaje interior del Espíritu es silencioso y basado en el Amor y la Conciencia intuitiva. Alguien realmente conectado a la Conciencia del Mesías puede transmitir ese espíritu de Amor con solo hablarte o mirarte. Es más profundo incluso que la telepatía.
Por contra, el Bautismo de Yojanan era un acto de conciencia que los esenios simbolizaban con un baño ritual en un mikhvé o piscina de purificación. Yojanan era jefe esenio y bautizó en el mismo río Jordan.
Pero ese paradigma ya no es válido hoy, porque hay un solo bautismo de Conciencia que incluye todo.
Eso sí, algunos cristianos despistados bautizan en el mar y ríos, y hablan de bautismo de arrepentimiento, cuando eso no está en el texto griego, que dice metanoia. La confesión y el arrepentimiento valen para poco porque es sólo un comienzo que a menudo acaba en una nueva recaída.
En cambio, -meta es más allá, un cambio, mientras que noia viene de noesis, que es mentalidad, consciencia.
Bapitizo o bautismo se relaciona con el Ba egipcio, el Cuerpo mental del Alma, que debe ser rescatado y devuelto a su Fuente Primigenia, el Abba, para no ser secuestrado por este mundo material. Y para ello debe voltear su mirada al Origen Primordial.
De hecho, en hebreo a eso se le llama Teshuvah, que significa teshuv hei, retornar a la Hei, la Luz de Vida donde se expresa el Amor verdadero, no el Amor controlador y posesivo.
No os conforméis con este mundo temporal sino que sed transformados por la renovación de vuestra mente (Romanos 12:2)
Por tanto, bautizarse en el Nombre del Padre y del Hijo, no es recibir agua y confesar Jesús, ni ningún otro nombre propio, ni siquiera Yeshua, Yahshua, Yehoshua, porque el Hijo es un estado de conciencia no palabrería. Hay códigos, ciertamente, pero deben comprenderse en si-len-cio.
Al tomar conciencia de que la Esencia de Amor, Vida y Luz serena viene dentro para rescatar lo perdido, nace la conciencia de Hijo divino. Pero hay que comprender lo que fue logrado por Yeshua mismo, que creó el modelo de un nueva Humanidad y la convirtió en la Imagen Divina del Padre:
estando muertos en nuestras transgresiones, nos hizo vivos con el Mesías, la Conciencia Universal… nos levantó en conjunto y nos sentó en los lugares celestiales en el Mesías Yesou (Efesios 2:6)
aboliendo en su carne las enemistades, la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas, para crear en sí mismo de los dos un solo y Nuevo Hombre, haciendo la paz, (Efesios 2:14)
Como dije en el Vídeo sobre Yeshua, él transmitió su Vida a todo el tejido neuronal, donde están nuestras almas divinas, para conectarse a nuestras almas humanas y unirse ambas para jugar el papel de cuerpo del mesías, Imagen Divina en la tierra.
Y todo esto estaba previsto desde incluso antes de que el caos universal llegara, pues el Cordero [todas las semillas de Luz mesiánica] fue inmolado antes del arrojamiento del Kosmos (Apocalipsis 13:8).
Es como si el Bendito hubiese anticipado cualquier posible Caída.
De hecho, la Enseñanza del Padre siempre existió. El Mesías sólo la demostró en un punto específico del Tiempo, aunque afectó tanto al pasado como al futuro, sacando almas perdidas en toda época.
Mismamente , en 1 de Pedro 3:18-20 se menciona algo interesante.
Porque también el Mesías padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos al Divino, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu, en el cual también fue a predicar a los espíritus encarcelados [los Ba, almas mentales caídas], los que en otro tiempo desobedecieron, cuando una vez esperaba la paciencia de Elohim en los días de Noé, mientras se preparaba el arca, en la cual pocas personas, es decir, ocho, fueron salvadas por agua.
Esos ocho es un código que alude a las ocho sefirot del Árbol de la Vida que van de Yesod a Binah y conforman el Hijo del Hombre o Zeir Anpin, que salva al alma dentro del humano.
Dicho rescate se halla también también en el Salmo 107:14
Los sacó de las tinieblas y de la sombra de muerte, y rompió sus prisiones…y llegaron hasta las puertas de la muerte. Pero clamaron al Ser Divino YHWH en su angustia, y los liberó de sus aflicciones. Envió su palabra (emanación), y los sanó, y los libró de su ruina. Alaben la misericordia del Ser, y sus maravillas para con los hijos de los hombres (Salmos – Tehilim 107:14-21)
¿Quién subió al cielo y descendió? ¿Quién recogió el espíritu personal (ruaj) en sus puños? ¿Quién envolvió las aguas en su manto? ¿Quién estableció todos los confines de la tierra? ¿Cuál es su nombre o el nombre de su hijo? Ciertamente tú lo sabes (Proverbios 30:4)
Pues es uno y el mismo. Precisamente, Yehoshua/Yahoshua
significa Salvación por medio del Verbo Divino, YHWH: Amor primordial,
Vida no alterada, Conciencia unitaria y serena.
El que invocare dentro del estado/nombre del Ser será Salvo (Joel 2:32)
En ningún otro hay salvación, pues ningún otro nombre ha sido dado a los hombres en que pueda haber salvación (Hechos 4)
Y esto supera la unión del Ba y el Ka que da lugar al Akh o Espíritu personal, que puede existir tras la muerte física, pero tamibén quedar atrapado en Reinos del Inframundo, o no ser capaz de ir más allá de paraísos astrales, hacia la Verdadera Tierra infinita, Tabel.
Por eso es necesario desarrollar el Ruaj Jayah o Espíritu de Vida, cuyas primicias son el Ruaj ha Kodesh o Espíritu de Purificación, cuya inspiración trae los primeros frutos de la Personalidad Divina en nosotros, haciéndonos células encarnadas del cuerpo mesiánico, reconciliando el mundo con el Ser Divino. Porque para eso hemos venido. En la Conciencia Universal del Mesías somos regalos, no víctimas, ni pecadores, ni perdedores. Todo ha sido hecho, dijo el Maestro. No asumir eso lleva a perder la Fe, la confianza, y es entonces cuando el perro se vuelve a su vómito, como dijo Simon Piedra.
Las iglesias presumen tener un Espíritu Santo, pero lo que vemos es gente poseída por personalidades demónicas que amenazan diciendo: no estudies eso, no hagas aquello; arrepentíos para no ser castigados…
Algunas incluso hablan lenguas raras, creyendo que son poseídas por ese espíritu santo. Y son poseídas, de eso no cabe duda.
Por contra, el Amor real no posee a nadie. El Amor sin Voluntad y Sabiduría real, es destructivo. Toda caridad y amor que no estén ancladas en la Luz Verdadera, es mero mercado y contrataciones.
Mismamente, los sacerdotes no pueden transmitir espíritu limpio porque tienen la conciencia bloqueada por pactos y contratos con entidades caídas. A lo mejor hasta transmiten espíritu santo, pero ya conocemos de sobra la santidad de las religiones. El mismo hecho de llamarse sacerdotes o “cerdos grandes”, con el prefijo Sa, de Samael, el nombre del Demonio, ya lo dice todo. No por casualidad insisten en ponerse collarines Sa-turnales; Sa-turno es un planeta pesado de rigor y oscuridad exterior, símbolo de Satán, el Adversario.
Sólo el espíritu del mundo conduce a levantar templos de piedra y religiones ritualizadas, todas las cuales han fracasado y llevado al desastre, porque el Hijo interior que las inspira es el alma caída de la vieja humanidad, los espíritus daimónicos ancestrales, que están encarcelados en el Inconsciente del Mundo, y tratan de resurgir poseyendo a la humanidad.
Y su origen es el Padre de los dioses, las inteligencias astrales llamadas el Demiurgo, Zeus, Deus, Jaldabaoth, falso Yhwh, siendo lo que causó el surgimiento de este mundo debido a lo que se conoce como Sabiduría de abajo, que da lugar a un Entendimiento falso.
Jehová me poseía en el principio, Ya de antiguo, antes de sus obras. Eternamente tuve el principado, desde el principio. Antes de la tierra (Proverbios 8)
La Sabiduría construyó su casa, levantó sus siete pilares (del Tiempo); mató sus víctimas, mezcló su vino, puso su mesa (Proverbios 9)
Una mesa con ritos de sangre, como los sacrificios y sangre de los falsos mesías. Todo cuando el verdadero Mesías no tiene sangre, sino Luz de Vida.
No podéis beber la copa del Verbo Divino, y la copa de los demonios; no podéis participar de la mesa del Verbo Divino, y de la mesa de los demonios (1 Corintios 10)
la carne y la sangre no pueden heredar el reino del Ser Divino (1 Corintios 15:50)
Ahora, ¿cómo llegó a corromperse la Sabiduría?
Esto se cuenta en el mito del Querubín Ungido, así como en el gnosticismo cristiano, que habló de Sophía Achamoth, que significa Sabiduría torcida, como Jokmah, pero revuelta. Y según el mito de Sophía, ella moraba en el Amor y Luz divinos, pero se aventuró a llevar ese Amor hacia la Oscuridad. Entonces la oscuridad robó la Sabiduría, la cual se llenó de miedo y así engendró un tipo de ser al que llamaron Yaldabaoth.
Dicho tipo de ser dijo: Yo Soy Dios y Señor de mis criaturas. Y lo asocian a Jehova Elohim, aunque es una lectura caída.
El verdadero Ser dice: No soy Dios, todo mi Amor, Vida y Luz serena son mi esencia y vuestra esencia, pues sois mi expresión. En el Amor no hay dominación.
Sin embargo, la Sabiduría caída ha copiado todos los aspectos de la Sabiduría verdadera y los ha torcido para camuflar la mentira.
Así la primera humanidad de Luz fue engañada. Y luego se cubrió con hojas de higuera, falsos cuerpos sutiles, falsas enseñanzas…
Un Midrash cuenta que Abraham quiso compartir la Sabiduría con toda la tierra, pero Nimrod se negó y le echó al fuego, apropiándose del Conocimiento. Y aunque Abraham sobrevivió, surgieron civilizaciones como la Sumeria y la Egipcia, llenas de Sabiduría y orgullo, la cuna de la civilización moderna.
En la religión Egipcia hay un Padre de los dioses, Atum, que surge de la Aguas Primordiales, Nun, se auto-reproduce por medio de Ra, y genera dioses o Hijos, como Osiris, que es sacrificado y descuartizado. Y en otro mito Osiris aparece en forma de Kristos Serapis, que viene de Seraph, la serpiente Kundalini, con la que se forma el cuerpo vital, Ka, que se une al astral o Ba mental, dando el Akh, un Merkaba o vehículo almático que puede viajar por otras dimensiones tras la muerte, yendo al Paraíso de los Muertos, la tierra de Osiris.
Y supuestamente su sangre astral lava los pecados de la gente. Pero es una espiritualidad torcida, de donde viene también la KaBaLah falsificada.
Y haciendo uso de esa misma Sabiduría torcida, la iglesia romana desobedeció la enseñanza del Mesías, erigiendo grandes basílicas, reformulando viejos ritos, como construir un falo de Osiris en medio de la Vulva de Isis, la Plaza de San Pedro.
Y para ganar almas, comenzaron a realizar el bautismo de infantes, que aún no tienen conciencia para comprender que la relación Padre, Hijo y Espíritu purificador en sentido primordial.
Lo que han hecho la Iglesia romana y sus derivados es básicamente dar un nuevo ropaje a las religiones paganas, con el objetivo de robar almas para el Inframundo, por medio de la confusión, mezclando la verdad con la mentira.
Y nada de esto tiene cabida en la Verdad. Pues el Padre de Luces es el Origen Absoluto, cuya emanación de Luz se hace Hijo y Cabeza al expresarse en un colectivo de seres que manifiestan Su mismo Espíritu o Personalidad.
Nadie ha visto al Ser Divino en sí, el Divino Unigénito que mora en el Seno del Padre le ha dado a conocer (Juan 1:18)
Pero quiero que sepan que la cabeza de todo hombre (mente) es el Mesías –Conciencia Divina–, y la cabeza de la mujer (corazón-cuerpo) es el hombre, y la cabeza del Mesías es Dios (Padre) (1 Corintios 11:3)
El Hijo es la Luz de Vida manifestándose en muchos seres primordiales, que son las Neuronas o Almas divinas o Neshemas que componen el plexo solar cósmico. Hay quien dice que cada uno somos un sol, una estrella. Pero recordemos que el mundo está llno de estrellas caídas. Para no caer, al venir al mundo de oscuridad, las almas divinas deben juegar el papel de Mesías o representantes de la Conciencia Universal, ya que vienen a iluminar y dar testimonio de nuestro Origen, el Sol Absoluto o Padre de Luces, cuya Luz Infinita es el Ser sin nombre propio.
Ahora cada uno debe darse cuenta de qué lado está. Se puede seguir entre los pañales de la religión, la pseudo-espiritualidad, la política y la ciencia, o podemos ponernos manos a la obra.
Seguramente el próximo día veremos que hay siete grados de comunión o devekut con el Ser Bendito. Algunos son esclavos de la energía, porque no tienen la Shekinah o Presencia Divina activada. Otros tienen su novia interior activada, en Yesod. Otros son mayordomos. Otros son ya Doncellas en la Torre. Otros andan como hermanos en pugna con Elohim. Otros se hacen amigos de Elohim. Otros asumen su unión con el Divino Ser y actúan como tales.
No son muchos los que hemos notado que el día de hoy es un ciclo espejo. Y según las estimaciones matemáticas sólo se da cada 1000 años. Pero en este caso se trata de un umbral poderoso.
0202 / 2020
Lo primero que llama la atención es que es un ciclo donde predominan el 0, el 2, el 20 y el 22.
El 0 es el arquetipo numérico del potencial divino y espejo o bien estancamiento, como ya vimos en el vídeo Conoce tu Destino y Psico-matemática: https://youtu.be/Fh94LsxF-v4.
El 2 es un número de manifestación, actualización de potencial, cooperación y acto de reflejarse en el objeto, pero también de dudas, dependencia emocional...
En cuanto al 20, arquetipo del Juicio, indica una necesidad de revisión, además de reconocimindo por parte de los demás, debido a una falta de auto-reconocimiento y visión global interior.
Mientras que el 22 es el famoso arquetipo del que se lanza a la aventura, llegando a ser Maestro Constructor de su Vida creativa, o un completo Loco, un enajenado que no sabe ni quién es ni qué vino a hacer.
Con esto en mente, ya tenemos todas las claves. Como siempre, el lado izquierdo nos habla del aspecto femenino, lo manifiesto, mientras que lo que no se ve, es masculino. Y arriba vemos que nuestro potencial de vitalidad creativa, lo femenino emocional, está en números rojos, se manifiesta de modo caótico, con tristezas, enfados, pasiones bajas, inconsciencia, inseguridad...
Así que necesitamos incorporar el lado derecho mascuino a lo femenino, llevando la fuerza de voluntad a la cooperación, la disciplina para guiar la vitalidad, la intuición para ser expresada, la consciencia aguda hacia la sensibilidad...Pues en la Realidad verdadera, masculino y femenino son uno.
Sólo así conectamos la esfera de Malkut, el Reino de muerte donde tenemos la Vida atrapada, al resto de esferas del Árbol de la Vida, donde se halla el 99% de la Realidad que no vemos, las 99 ovejas que vienen a buscar a la que se había perdido, como enseñó el propio Yeshua. Ahora, lo que más remarca el 22 en este umbral es la necesidad de permanecer en el proceso creativo de construcción, desarrollando un proyecto concreto. De lo contrario, seremos golpeados por la sombra del 22, que es una falta de confianza, la pérdida de nuestros ladrillos vitales y la ausencia de propósito, que llevan a la falta de vitalidad y enfermedad. Y si el 2020 ya es de por sí un año de sincronías, reflejos del interior en lo exterior, este umbral que cruzamos lo está acentuando aún más. Incluso parece que diversos sucesos caóticos reflejan el caos interno, y que en la mayoría de casos desvian y externalizan la atención de la gente: el coronavirus, la muerte de Kobe Bryan, los ataques de hoy en Europa...¿Y qué más? ¿Hacia dónde estamos mirando? ¿Hacia dentro o hacia afuera? ¿Qué arquetipos se manifiestan desde nuestro trono inconsciente, la Humanidad de Luz o los Daimones tarados?
Así pues amigos, ojo avizor, que la Realidad siempre está dispuesta a mostrar sus sincronías. Y cuanto más conscientes nos hacemos, más se escucha la Voz del Planeta, pues la Mente y Corazón superiores captan sus mensajes.