Canto De Realidad: julio 2020

En el previo episodio ya vimos algunos principios de transformación y hoy es hora de ver una cuestión muy importante que apenas se trata porque la mayoría de enseñanzas espirituales están invertidas o son incompletas.

Camino de los Héroes

Comencemos señalando que hay cuatro caminos básicos de espiritualidad. Al primero le doy en llamar camino de los héroes e incluye al chamanismo. Hallamos sus carácterísticas en los famosos viajes de los héroes mitológicos al inframundo, donde luchan con todo tipo de monstruos haciendo uso de fuerza descomunal y astucias del intelecto. En Grecia se habló de Hércules y sus 12 trabajos, que simbolizan los 12 psicotipos astrológicos. En el judeocristianismo fue famoso Samson, que tras matar al león de sus pasiones, cayó en las manos de Dalyla, la Oscuridad que le dejó ciego. Luego destruyó el templo (del cuerpo) tirando los pilares de la dualidad donde le amarraron, pero acabó muriendo como el resto de héroes.

Esto nos hace ver que a pesar de la fuerza, la astucia y poderes que se desarrolla en ciertos caminos espirituales, el mundo de ilusión atrapa a cualquiera cuyo ego esté elevado de tono.

Camino Devocional

Luego tenemos el típico camino devocional, propio de la religión exterior. Ahí tratan de seguir reglas y rituales estipuladas por lo que se llama Señor Dios, que exige obediencia, adoración y sumisión. Por desgracia, este segundo camino los fieles se convierten en robots que no cuestionan aquello que es ilógico, no llegan a comprender que el Amor Primordial no puede tener que ver con un Señor Dios, idea babilónica que significa amo de esclavos o dueño de alguien inferior. El Amor divino eleva a todos a la expresión del Bendito Ser.

Los fieles de la religión externa tampoco llegan a entender que el Bendito Ser no ordena mandamientos ni rituales. Incluso Pablo de Tarso aseguró en sus cartas que la religión de mandatos era el ministerio de los Ángeles. Y por supuesto, los Ángeles aseguran trabajar para el Bendito, pero hay dos bandos. Y al investigar vemos que las religiones vienen de seres opresores o bien señores adámicos caídos que trataron de hacer al humano corregir la caída al mundo. Por eso el segundo camino es de dualidad y conflicto.

Sin embargo, dentro de la religión surgieron místicos como Meister Eckart o Rumi, que rompieron sus cadenas mentales por medio del Amor real, abandonando escrituras y la idea de un Dios Señor separado, se liberaron con la devoción amorosa hacia el Ser mismo que mora en todo y en todos. Ello demuestra que el Amor transforma hasta la religión.

Camino del intelecto divino

En tercer lugar tenemos la vía del intelecto y auto-indagación, del cual hay diversas variantes. Algunos hablan de Gnosis, en la India hablan de Radja Yoga, que cultiva la mente divina por medio de los ocho pasos del Yoga que llevan a la meditación y nirvana.

Muy interesante es el Gnana Yoga, basado en el Advaita Vedanta, Conocimiento de la No Dualidad, o Adualidad. Tiene diversas variantes y aproximaciones peros las más famosas son las de Shankara, Ramana Maharshi y Nisargadatta.

La idea fundamental en ese camino es preguntarse constantemente ¿Quién Soy Yo? Y aquel que percibe la raíz de su ego, puede ver que es el nudo desde donde surge toda la ilusión fenoménica. Y una vez se percibe el Yo Soy egoico, uno puede soltarlo en el océano sin límites de Sat (Ser), Chit (Conciencia) y Ananda (Dicha). En términos tradicionales algunos lo expresan como el paso de Ahamkara (contracción egoica), al Atman (Alma divina interior), que es Brahma (Gran Mente Creadora), que viene de Brahman (Absoluto) y finalmente se disuelve en Para-Brahman, lo inaprensible.

En ese camino se busca al Sat Guru o Ser Maestro Universal, que conduce a la disolución de toda la ilusión y cese de toda reencarnación, que es part de la ilusión.

Se dice que Ramana Maharshi se iluminó de joven y sólo permaneció vivo como Alma Liberada (Jivanmukta) por karma remanente, igual que la vasija de barro que da vueltas por inercia. Así vemos en Ramana un hombre que se retiró a su montaña y dejó de cuidar su cuerpo. La gente le visitaba y él permanecía a veces largos períodos en silencio, absorbido. ¿Pero es la auto-aniquilación de veras iluminación?

Lo cierto es que no tiene en cuenta muchas trampas, pues no por mucho disolver nos vamos a liberar. Hay almas que pueden ser recicladas al disolver sus vestiduras en cierta luz y dada su falta de comprensión, son obligadas a retornar. De ahí el túnel giratorio de luz que ven muchos, a quienes les esperan familiares, Buda, Jesús mismo o ángeles que aseguran que el alma debe volver a la tierra.

Otra aproximación al camino de la mente es la Gnosis griega, que deja fuera muchos elementos.

Otra aproximación mental es la Kabalah en sus diversas formas. Su esencia es la meditación sobre la estructura de la realidad, el verbo existencial (Yhwh), comprendiendo las vibraciones que se expresan en letras hebreas, el ADN de la Creación. Sin embargo, no todas las cábalas son iguales. Incluso la Sabiduría hebrea se ha mezclado con la ciencia de este mundo.

Desde tiempos muy antiguos se ha hablado de cómo la Luz divina vino a ser atrapada en un universo material denso, y esto se expresó con el lenguaje de la Naturaleza, tal como vemos en numerosas enseñanzas, incluido el Alfabeto Hebreo y la Astrología.

La cábala judía por ejemplo habla de la ciencia de unicidad expresada en el Sefer Yetzirah, atribuido a Abraham. Básicamente nos habla de cómo se formó este mundo físico, cuyos códigos son 12 signos astrológicos asociados a 12 letras simples, 7 planetas asociados a 7 letras dobles, tres letras madre (Mem, Shin, Alef), y cuatro estados, asociados al Yhwh. Todo estructuras que esconden u ocultan el Almah o Doncella de realidad divina, la cual permanece como Shekinah exiliada que debe retornar para vestir al Bendito.

De ahí bebieron numerosas tradiciones de conocimiento, aunque todo permaneció oculto.

Grandes cabalistas como Rabbi Shimon bar Yojai e Isaac Luria expandieron la visión y aclararon muchas secretos codificadas en la Torah y el Sefer Yetzirah. El primero transmitió el Zohar e Isaac Luria aclaró las cuestiones concernientes a la caída de los Elohim, Adam, sus reencarnaciones, en el contexto del Mesías Universal.

Fue Luria quien explicó cómo las almas mentales (neshemot), que pertenecieron a los primeros Adanes, quedaron atrapadas en reencarnaciones, gilgulim ha neshemot, y deben regresar por medio de una reparación o tikún, bien sea en forma de nefesh/alma vital, en otros cuerpos físicos, o retornando por Ibur, dentro de otras almas, cuando son más avanzadas.

A pesar de todo, el trabajo cabalístico es eminentemente intelectual, y en general incluye rituales y meditaciones con tintes religiosos que llegan a deformar la realidad que la misma Sabiduría de Luz primordial expresa.

Camino de Vida Integrada

Cuando vino el Mesías Yshua, él habló de cancelar de golpe todo tikún o necesidad de reparación y reencarnación, por medio de la integración en el Alma Universal o Adam Primordial, la Humanidad que nunca ha caído. Fue llamada Yahoshua en hebreo porque significa Salvación por medio del Verbo Existencial armonizado, así como Emanuel, Fuerza divina en nosotros.

Pero el Maestro enseñó que no se puede poner vino nuevo en odres viejos.

La liberación no es por medio de la completa disolución en el absoluto, ni el estudio de la Torah escrita o codificada, ni ningún otro libro considerado sagrado, porque todo está leudado con levadura de mentiras. Él mismo decía a los fariseos: ¿no está escrito en vuestra Torah…?

Mas no vino a anularla, sino a manifestar la Torah de Luz interior.

Sed mansos como palomas y astutos como serpientes.

Por eso hemos de separar la paja del trigo y acceder a la Verdad viviente, que es la Realidad de Ser que crece dentro de nosotros. Por supuesto, eso implica conocer cómo está estructurado el mundo y sus engaños, comenzando por nuestra percepción de nosotros, el mundo y los demás. Veámoslo de modo resumido.

El Yo Auto-transcendente

No es enteramente cierto decir que todo el mundo es ilusión, como sostienen corrientes No Dualistas. El mundo de la Matrix es una mezcla de Verdad y Mentira. La ilusión tiene grados y mucho éxito, por cierto. Si todo fuera mentira, nadie la creería.

Una vez se escribió: no tomarás el nombre Yhwh (Verbo existencial) en vano (Éxodo 20).

Y casi nadie entendió que se refería al uso que hacemos de la percepción de Ser. El verbo existencial hace real todo lo que toca.

De ahí la sentencia: Yo soy Yhwh, y nadie más crea la Luz ni forma la oscuridad (Isaías 45:6-7).

Si sentimos que fuimos yo fui maltratado, y sentimos yo soy víctima, eso nos hacemos.

El Ego cósmico es un Doble Cuántico que abarca pasado, presente y futuro, dándonos personalidades falsas, sujetas a muerte. Por eso es preciso ser Nada primero, para poder saborear todo de golpe.

En hebreo Yo Soy o Yo se dice Any, pero al revés es Ayn, Nadie, Nada que podamos definir con palabras.

Y su resplandor sería el Adán/Adam Primordial a cuyo Alma realmente pertenecemos.

El verdadero Yo no es un Sujeto frente a Objetos, sino una Conciencia con dos polos unidos: el sujeto se hace objeto, el observador es lo observado. El Gran Yo Soy se siente a sí mismo y percibe a los demás como expresiones del movimiento de Amor, Vida y Conciencia Serena.

Esto nos salva de caer en la ilusión del monismo pseudo-místico diciendo que todos somos Uno porque todo es materia y la materia es energía.

En realidad la materia/energía es sólo una cualidad del resplandor luminoso del Bendito Ser, que se expresa como Humanidad Cósmica de Luz y mora en el Espacio de Luz infinita, el Éter.

Ahora, ¿quién se salió del Adam Primordial? ¿Y cómo somos liberados?

Creación de la Matrix Adámica

El Espacio de Luz infinita recibió diversos nombres. En Grecia los sabios lo llamaron Aither, mientras que en India es el Akasha. Su existencia ya se intuye en la Física Cuántica, aunque aún en pañales, hablan de fantasías, como la Partícula de Dios, Bosón de Higgs, etc.

Incluso hoy alguna científicos hablan de cinco estados de la materia: sólido, acuo-gelatinoso (intra celular), líquido, gaseoso y plasmático. Y aunque cada vez se aproximan más a la Ciencia Antigua, aún les queda un trecho.

El Éter siempre fue y será el Espacio substancial invisible que permea todo y donde impacta la Amorosa Luz Infinita que procede del Origen Primordial. Así emerge constantemente un Kosmos con formas de Vida luminosa donde crece la Consciencia perceptiva de la Vida, llevando a la serena Conciencia dichosa.

Sin embargo, tal como el mismo Salomón dijo en Proverbios 8 y 9, la Sabiduría, Sophía, estaba con el Verbo Existencial (Yhwh) en el Origen, y la Sabiduría erigió su casa, labró sus siete columnas, mató su víctima, templó su vino y puso su mesa (Proverbios 9 SE 1569).

Fue así como todo comenzó a hacer más denso, y Seres Serpentinos de Sabiduría torcida se aprovecharon del movimiento del Amor, convirtiéndolo en Eros. Así nació el falso Yhwh, el verbo existencial que no sólo genera formas sino que constriñe, porque las formas generan una Matrix donde la Vida se pierde a sí misma y se desconecta.

Fue así como Cielo y Tierra llegaron a ser desordenados y desolados (Génesis 1:2).

Podemos decir que ésta fue la rotura de las vasijas o shevirat ha kelim de la que habló Isaac Luria.

Y Elohim separó la luz de la oscuridad.

Las fuerzas divinas comenzaron a dividirse en Luz y Oscuridad, generando planos dimensionales, astros, ciclos de tiempo y especies diversas, tal como describe Génesis 1.

Y los Elohim o Arquitectos, queriendo rectificar el caos dijeron: hagamos a Adam (la humanidad) a nuestra imagen de acuerdo a nuestra semejanza, y se enseñaree sobre los seres del agua, del aire, las criaturas de tierra y los seres reptiles. Y creó Elohim a Adam a su imagen, imagen de Dios lo creó, macho y hembra (Génesis 1:26)

Pocos entienden que no se refería a una humanidad ni seres como los que vemos en nuestra dimensión, sino a criaturas de varios planos dimensionales, sobre todo los tres inferiores, Beriah (Mundo de Creación), Yetzirah (Mundo de Formación) y Assiyah (Mundo de Acción): Adam dio nombre a toda bestia, seres del aire y criatura del campo, pero Adam no halló ayuda idónea (Génesis 2:18)

Quiere decir que la Consciencia divina no casaba plenamente con criaturas alienígenas, las cuales por supuesto se hicieron animales más inteligentes al recibir inteligencia divina.

Pero en la Realidad primordial no hay semejanza pues no hay sombras, luego el intento de hacer una humanidad uniendo Luz y Oscuridad fue un experimento del Dios caido, destinado al fracaso. Ni siquiera los Elohim sabían qué saldría: Y creó Yhwh Elohim criaturas…para ver cómo las llamaba/impregnaba el Adam (alma vital).

Así fue como surgió un nuevo tipo de Adam, partido en hombre y mujer, Adam y Jawah/Eva, mente de luz y cuerpos de luz, que se mezclaron con almas reptiles de la previa creación caída. Comieron del Árbol del Conocimiento del Bien y del Mal.

Esto se expresó en la Alquimia como Luz inmortal atrapada en el Adam material, hecho de Tierra, Agua, Aire y Fuego.

En la enseñanza de Empédocles fue el Eros o Amor egoísta el que reunió los cuatro elementos, Tierra, Agua, Aire y Fuego, atrapando el Éter, que es la substancia del Alma inmortal, la cual se ve obligada a reencarnar y transmigrar por diferentes criaturas hasta que es liberada por la disgregación (Neikos), para regresar al Sphiros, la Esfera de Luz Original.

Y la mayoría de autores malinterpretaron Neikos como mero Odio, y vieron la generación del Eros como positiva, cuando es lo contrario según Empédocles, heredero de Pitágoras.

Empédocles habló de sembrar la palabra divina en el espacio de la consciencia, para que pueda crecer el Árbol de Vida. Una enseñanza que más tarde expandiría y demostraría el Maestro.

Él mismo dijo Yo Soy la Luz del Kosmos (Juan 8:12) y vosotros sois la Luz del Kosmos (Mato 5:23).

Nada de Yo Soy la Luz del Mundo y vosotros sois unos meros pecadores, como defienden los pseudo-cristianismos.

También se dijo Yo soy el Alfa y la Omega, que en hebreo sería la Alef y la Tav, primera y última letra del Alfabeto. ¿Por qué?

Alef representa el Espíritu de Conciencia que fue atrapado o crucificado en los cuatro elementos, la Cruz de la materia densa, que en paleo-hebreo y otros lenguajes picto-simbólicos se representaba como una Cruz.

En Egipto el Krst era la encarnación de la Luz en el cerebro.

Y curiosamente, las cuatro últimas letras de los Alfabetos son QRST, que viene de Quf, Resh, Shin y Tav.

De ahí derivó la palabra Christos, ungido de luz en griego. Pero eso no implica iluminación, pues hay cristos caídos, como los faraones, los héroes, el querubín ungido...

Sin embargo, podemos ver todo el Alfabeto como niveles de comprensión que hay que integrar para no quedar atrapados y disolver las tensiones que forman el Ego Cósmico o Experiencia de Gran Oscuridad.

Por ejemplo, las tres letras madre: alef es el espíritu que resulta de unir el agua, simbolizada por la mem y el fuego, letra shin. Aplicando el fuego de conciencia sublimamos las aguas existenciales.

Y despertar implica recordar la casa del Padre, Beyt, caminando humildemente, soltando la carga del ego, simboliado por la letra Gimel y el camello. Contemplando conscientemente que somos Luz y no formas materiales densas. Eso sería la letra Hei, que en paleo-hebreo era como un ser alerta:

Eso nos ancla a tierra y al cielo, conectando, como hace la Vav. Y necesitamos el hacha del discernimiento, la letra Zain, saltando muros y ceras, letra Jet, etc.

Disolver tensiones es transcender falsas creaciones. El mismo Krst deriva de Krrrrr, energía cristalizándose, o dicho de otro modo, Creación.

Y esta creación física no fue para liberar sino para someter a la Luz a tormento. Y así fue enseñado por los profetas: como cordero fue llevado al matadero…quiso Yhwh quebrantarle con padecimientos (Isaías 53)

Vemos que aquí Yhwh significa la acción y entidades caídas que hacen surgir la materia densa. Es el reino de los astros.

Esto lo vemos en las 7 letras simples, que se vinculan a los 7 astros, y 12 letras simples hebreas, que se corresponden con las 12 casas zodiacales: Hei va con Aries, Vav con Tauro, Zain con Geminis, Jet con Cáncer, Tet con Leo, Yud with Virgo, etc.

La rueda de los signos o mashalim y el Alef-Bet representa las etapas de encarnación de la Luz o Shekinah del Hombre Primordial o Adam Kadmon, cuya liberación implica ir más allá del Verbo constrictor o Serpiente Ouroboros, que rige la reencarnación.

Yhwh persigue la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación (Deuternomio 5)

Esto no sólo hace referencia a la generación familiar, el llamado pecado transgenracional, sino que la Kabalah misma lo asocia a los Ibur o retorno de almas más avanzadas. La reencarnación de generación en generación sucede al Nefesh, mientras que el Ibur sucede cuando un espíritu (ruaj, pneuma) se mete dentro de un nuevo Alma emocional o ruaj para seguir evolucionando o servir a modo de espíritu guía, como el famoso espíritu de Elías.

Liberación en el Nuevo Adam

Cuando comprendemos el camino trazado por los antiguos, incluidos los profetas, aún podemos atisbar el camino de la lucha propuesto por los héroes.

Recordemos que Elías mismo ejerció poder contra los sacerdote de Baal, y huyó para no caer en manos de Jezabel. Incluso dejó su cuerpo a voluntad, supuestamente.

Elías no murió; fue llevado al cielo en un torbellino mientras cabalgaba en un carro de fuego (2 Reyes 2:11)

Hacía referencia a un merkaba de luz. Y desde entonces se convirtió en lo que los cabalistas llaman Sandalfón, guardián de las almas encarnadas, unto con Metatrón, que son las almas tipo Enoc.

Dicho claramente, Elías representa un tipo de alma adicional que por Ibur viene a ayudar.

He aquí, yo os envío a Elías el profeta, antes que venga el día de Yhwh grande y terrible (Malaquías 4:5)

En esa profecía pensó el Maestro al decir:

Y si quieren aceptar mi palabra, Juan (el bautista) es el Elías que había de venir (Mateo 11:7-14)

porque él (Juan el Bautista) vino en el "espíritu y poder de Elías" (Lucas 1:17)

Sin embargo, a Juan el Baustista, aún con el Espíritu de Elías, le cortaron la cabeza. Era un paradigma incompleto.

¿A quién habéis visto en el desierto, a una caña?, preguntó el Maestro en referencia al Juan, que más bien fue quebrado como un tronco seco.

El Maestro no proponía un camino de esfuerzo, oposición y rigidez, sino de cañas que se doblan al viento.

Aún así, en la transfiguración aparecen Elías y Moisés a su lado, porque el Alma del Mesías integra y transfrma los previos ropajes almáticos: el Nefesh vital del Adam caído, el Ruaj emocional de Moisés y la Neshemah mental de Elías.

Eso es un estado que ya había sido logrado por Enoc en tiempos previos, sin tanta obstrucción:

Y anduvo Enoc con Elohim, y desapareció, porque le llevó Elohim (Génesis 5:24)

Quiere decir que caminó con el verdadero Ser y transcendió la Matrix de Ilusión. Por eso se le llama Metatrón, más allá del Trono del Ego podemos decir

Aunque el Maestro Yshua fue un paso más allá, que es hacer so cruzando las tinieblas en un cuerpo del Adam Enosh caído. Así vino a ser modelo del Último y Nuevo Adam:

El primer hombre Adán fue hecho un alma viviente; el postrer Adán, un espíritu vivificante (1 Corintios 15:45)

El Nuevo Adam es el Alma que revela al Hombre o Padre Primordial, el vehículo del Ser Infinito.

Padre guárdalos en tu Nombre (Personalidad), que yo les he manifestado, para que llos sean uno como tú y yo somos uno (Juan 17:11)

Y esto es morar en el Gran Yo Soy, que se hace tú y nosotros, pues crece por doquier. Así podemos decir que es un Yo Soy Seres Somos.

No es que todo sea ilusión en un Yo impersonal, como dicen en la India, ni que todos seamos Dios creador. Más bien somos el Alma Auto-Consciente del Infinito Ser, que ni crea ni deja de crear, porque lo que crea es la mente que cree y manifiesta, de acuerdo a su comprensión del Verbo existencial, YHWH.

Yo, ahora, elijo creer en el Amor incondicional, la Vida no alterada, la Conciencia dichosa y serena, donde todo se sublima y retorna al estado original.

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